¿Cómo entrar en la industria de videojuegos?
Cuatro pasos que puedes seguir si quieres comenzar a trabajar en videojuegos.
“Me dedico a hacer videojuegos”. Esa es normalmente la respuesta que doy cuando me preguntan a qué me dedico en una reunión de amigos, cuando me presentan a alguien o cuando paso por migraciones en el aeropuerto. La respuesta de mi interlocutor suele ser algo como: “Ah, ¡qué divertido!”, o “a mis hijos les encantan los videojuegos, paran pegados al celular”. Otros no entienden lo que les acabo de decir o me miran con recelo. Pero otro grupo abre bien los ojos, sonríen y me preguntan, “¿cómo podría entrar a hacer lo mismo? Los videojuegos siempre han sido mi pasión”.
Muchas de estas personas suelen ser bastante exitosas en lo que hacen. Pero cuando me hablan sobre los juegos que han jugado o de las ideas que tienen se nota que su verdadera pasión es otra. Lo mismo pasa con los más jóvenes, que están por acabar el colegio o están en la universidad y tienen como sueño crear su propio videojuego. Hoy, afortunadamente, es el mejor momento para entrar a la industria. Por eso en este post quiero listar cuatro recomendaciones para que cualquiera pueda entrar a la industria de videojuegos.
1. Investiga cómo se aplica en la industria lo que ya sabes hacer
Hacer un videojuego no es solo cosa de programadores. Ni solo de artistas. Para hacer un videojuego se requieren habilidades y roles diversos. Por ejemplo, el game designer es la persona que se encarga de crear las mecánicas del juego y diseñar los retos que los jugadores tendrán que pasar. Y dependiendo del género del juego, sus responsabilidades pueden variar bastante. Lo mismo pasa con los compositores, diseñadores gráficos o escritores. Es un oficio multidisciplinario y de esa combinación de habilidades y personalidades es de donde salen las mejores experiencias.
Pero aparte de aquellos roles, los videojuegos son un producto (y también un servicio, que es algo de lo que podemos conversar en otro post) y se necesitan personas de marketing para promocionarlo, abogados para armar los contratos de distribución, personas de recursos humanos para ayudar a crear un buen clima de trabajo en el estudio, administradores para ordenar la empresa, etc. Conforme la industria ha ido creciendo se ha abierto más y cada área se ha profesionalizado. Por eso, quizás la carrera que has estudiado (o estás por comenzar a llevar) puede ser muy útil para algún estudio o equipo que ya esté desarrollando un videojuego (grande o pequeño). Hace poco, por ejemplo, conocí a una persona que luego de trabajar en finanzas para una empresa de medios en Perú y luego en otra de salud, estuvo en un proceso de selección para trabajar en Riot Games, que había empezado su expansión en Latinoamérica. Una de las preguntas que le hicieron fue cuántas horas a la semana jugaba League of Legends.
2. Conecta con desarrolladores de videojuegos
Las comunidades son muy importantes en todas las profesiones. Hay conferencias de médicos, de abogados, de publicistas. En la industria de videojuegos pasa lo mismo, y lo mejor es que nadie te juzgará si vas con un polo con el logo de StarCraft. Los contactos son muy importantes, sobre todo si aún no estás en la industria y quieres encontrar una manera de entrar.
Evento de la IGDA Perú (Créditos: IGDA Perú)
En cada país suelen haber comunidades establecidas que organizan eventos virtuales o físicos para conocerse o aprender sobre algún tema. A veces es el capítulo local de la IGDA (International Games Developers Association), a veces la asociación gremial de cada país o a veces un grupo de desarrolladores que solo quiere reunirse y lo publicita en redes sociales. La razón es solo una excusa, lo mejor es conocer a otras personas y enender cómo está organizada la escena de videojuegos en tu ciudad: qué estudios existen, qué proyectos están trabajando o qué actividades vienen en el futuro.
Una de las mejores cosas de la industria de videojuegos, y sobre todo la de los países que aún no tienen una industria tan desarrollada, es que todos suelen ser bastante amigables y generosos. No hay mucho secretismo ni envidias como puede pasar en otra industria y eso ayuda a que todos se ayuden entre sí.
3. Aprende sobre cómo se desarrolla un videojuego
Hacer un videojuego ya no es lo que era antes. Ya no se tienen que fabricar cartuchos y meterlos en cajas para mandarlos por todo el mundo. Y si bien los juegos AAA necesitan miles de personas repartidas en estudios de todo el mundo, hoy también se pueden hacer juegos de menor escala con equipos de unas cinco personas, o incluso por tu propia cuenta.
Han aparecido motores de videojuegos (un software que te hace la vida más fácil cuando quieres hacer las cosas típicas que podrías necesitar para hacer un videojuego) como Unity, Unreal Engine o Game Maker que son más fáciles de aprender que lo que toma hacer un juego desde cero y hay tutoriales en internet que te ayudan a comenzar a entenderlos. Y si la programación no es lo tuyo puedes trabajar con un equipo en la disciplina que mejor te acomode. Quizás te apasiona crear animaciones o imaginar las mecánicas del juego y hacer niveles.
La mejor manera de aprender a hacer un juego es hacerlo, y a veces estos tutoriales o cursos por internet son una excusa para aprender más del desarrollo de juegos y comenzar a armar un portafolio.
4. Asiste a un game jam
Y si quieres pasar por una experiencia express de cómo se hace un videojuego, conocer gente de la industria y comenzar a armar tu portafolio, puedes asistir a un game jam.
Un game jam es un evento que suele durar 48 horas (aunque hay game jams más cortos y más extensos) y en él se tiene que hacer un prototipo o demo de un juego a partir de una premisa que se da al inicio del evento. Los equipos se pueden formar en el momento y no importa si no tienes experiencia, siempre habrá alguien que te podrá guiar. La adrenalina de hacer algo en un fin de semana y estar al lado de mucha gente que está haciendo lo mismo suele ayudar a que casi siempre se acaben los prototipos a tiempo.
Es una excelente forma de perderle el miedo a hacer un videojuego y conocer gente con la que quizás puedes seguir colaborando. Dato curioso: el estudio que dirijo nació en nuestro primer game jam y el juego que prototipamos ese fin de semana años más tarde salió en una consola de PlayStation (pero esa es otra historia).
Conclusión: No es tan difícil como parece
Esos fueron cuatro pasos que puedes seguir si quieres entrar a la industria de videojuegos de forma profesional o incluso si quieres entrar a ella como un hobby en tus ratos libres. Y sí, necesitamos que más personas entren a la industria, porque digamos que tenemos un grave problema de diversidad (el primer paso para solucionar un problema es aceptarlo). Así que ojalá te puedas animar.
Gracias por leer este post y si tienes sugerencias de temas o preguntas puedes escribirme a luis@luiswong.com o enviarme un DM en Twitter (@wongcito).
Links útiles
De hecho, el Banco de Crédito del Perú está organizando un game jam. Está orientado a estudiantes y recién egresados pero siempre pueden preguntar si quieren participar y son un poco más viejos. Hay miles de soles en premio.
El mejor canal para aprender a conceptos de game design es el canal de Mark Brown. Y también pueden seguir el del director de varios juegos de Kirby y los juegos de Super Smash Bros. Y bueno, el podcast de Hideo Kojima (el creador de Metal Gear) también acaba de salir.
Cada país tiene una comunidad de videojuegos. En Perú pueden seguir las redes de la IGDA Perú y FemDevs Perú. Si quieren ver la de otros países pueden revisarlo en la Federación Latina de Videojuegos, que reúne a las asociaciones de cada país.